Credito DR
A lo largo del festival Lumière, la mayoría de los largometrajes proyectados no son recientes. La esencia de este festival es de rendir homenaje al cine, pero también a sus inicios, así, la presencia del nieto de los hermanos Lumière era inevitable y de los grandes nombres del cine francés como : Michel Hazanavicius, Jean-Pierre Jeunet o Bertrand Tavernier, e internacionales: Keanu Reeves, Penelope Cruz, Faye Dunaway y por supuesto, Pedro Almodovar, estuvieron en cartelera. Unos de los tributos fueron rendidos a los grandes nombres del cine, las sesiones se llenaron al completo para las películas de temporada. Es palpable la voluntad de celebrar el cine, desde los que están presentes para recordar la puesta en escena de estos largometrajes, hasta los jóvenes curiosos queriendo asistir a una sesión de cine única, sin importar la edad de los espectadores.
Los clásicos : un objetivo que lograr
Siempre es delicado hablar de los clásicos, así como para de los gustos, cada persona tiene su propia opinión y para algunos, unas películas marcaron más que otras. Los “clásicos” dependen mucho de la época en la cual se ha vivido y así simplemente de lo el entorno considera como clásico. Pero ciertas películas, cuyos títulos son conocidos por todos, cuya historia es arraigada en la memoria de los cinéfilos, son sin duda vistas como modelos.
Tienen el objetivo común de hacer que los espectadores sueñen. A menudo presentan aspectos de la vida que nos gustaría que existieran, por este motivo, La vida es bella de Frank Capra (1946) dejó huellas en las mentes. Este largometraje es la encarnación del American Dream, idea según la cual no hay que perder la esperanza y que todo es posible en los Estados Unidos. Aunque no tuvo mucho éxito al principio frente a un público de posguerra pesimista, fue apreciado por todo el mundo poco a poco, y sigue siendo difundido en los EEUU durante Navidad. Otra película todavía bastante difundida es Bonnie and Clyde, de Arthur Penn (1967), es radicalmente diferente a la primera, porque se trata de personajes que roban bancos en serie. Los protagonistas son descritos como héroes, lo que fue muy controvertido, pero va a marcar también una generación entera. La polémica que inspiró este largometraje proviene del carácter rebelde y libre de los personajes, lo que dio a los jóvenes mucha envidia de aspirar a una vida idéntica.
Credito DR
Por fin, si analizamos un último ejemplo de una película notable, El bueno, el malo y el feo, de Sergio Leone (1966) se sitúa entre el clásico y la película culta. Se puede considerar como un clásico porque tuvo un éxito importante, para la mayoría de los espectadores, y porque no es el primer largometraje de este tipo, pero también se utiliza mucho como referencia, siendo la película más famosa de Sergio Leone. Es apreciada por la época que retrata, – la guerra de secesión –, la realidad de la situación histórica, la violencia, los actores, etc. Fue una fuente de inspiración para varias otras, y hoy en día forma parte de los mejores westerns que hayan producido. Por los diversos valores morales que transmiten tal como la esperanza, el amor, la libertad, el coraje, dan ganas de conocer el mismo estilo de vida o estas mismas cualidades que tienen los protagonistas, que parecen reales, a causa de los defectos que pueden tener y los actos irreparables que pueden cometer como: el suicidio, robos, asesinatos, etc.
Las películas cultas : unas innovaciones controvertidas
Tres largometrajes sobresalieron de los demás, difundidos durante el Festival : La matanza de Texas de Tobe Hooper (1974), Rambo de Ted Kotcheff (1982) y Los cazafantasmas de Ivan Reitman (1984). Pertenecen a la categoría de las películas cultas, ya que marcaron la mente de todo el mundo como lo hicieron los clásicos. Muy a menudo, son controvertidas y caracterizadas por un incomparable numero de seguidores.
Credito DR
La matanza de Texas esconde una verdad proveniente de la historia real de Ed Gein, un hombre que exhumó unos cadáveres de un cementerio en 1957. Al comienzo de la película, Tobe Hooper disfruta de esta oportunidad para anunciar que la historia que va a contar es verdadera, para atraer a la gente y así crear más controversia. Fue el preceptor de los “slashers”, largometrajes cuyo protagonista es un psicópata que persigue a un grupo de personas para asesinarlas. Lo consideran como una de las mejores películas de terror de todos los tiempos, lo que se explica probablemente, de una parte, por su aspecto innovador, y su manera de filmar, que casi hace pensar que es un falso documental. Por otra parte, por su casi realismo con momentos, a veces, divertidos, pero sobre todo por el hecho que el enemigo puede ser cualquier persona. El largometraje estuvo prohibido durante 8 años en Francia y 15 años en el Reino Unido por culpa de sus escenas violentas, el peso psicológico que tiene y los escenarios macabros, y hoy sigue estando prohibido a los menores de 16 años.
De la misma manera, Rambo puede parecer violento y es posible que no lo hayan aceptado muy bien los estadounidenses, porque no querían hacer frente a los problemas que generó la guerra. Efectivamente, la película demuestra que la guerra puede destruir psicológicamente a una persona de manera muy grave, y hasta que punto es difícil la reinserción después de una guerra.
Un sentimiento de culpabilidad nació de este largometraje en el pueblo estadounidense, que prefería quedarse con los ojos cerrados con respecto a este problema. Sin embargo, sigue siendo una película culta por su moral, como los clásicos : el protagonista es valiente y quiere vengar la muerte de uno de sus amigos; pero también por su realismo psicológico con respecto a los héroes de guerra. Por fin, en un registro totalmente diferente, Los cazafantasmas nos ofrece una comedia de ciencia ficción que es una de las referencias de este estilo cinematográfico. Fue una innovación mezclar los dos estilos y el resultado fue excelente : en comparación a otros largometrajes, la audiencia salió mucho menos dividida. Además, gracias a los efectos especiales que fueron muy bien realizados para la época, la música – que sigue siendo famosa hoy en día también por los que no la han visto - y las sorpresas sucesivas que puede traer el largometraje, tan imprevisible, conoció un éxito más importante que Gremlins de Joe Dante o Indiana Jones y el templo maldito de Steven Spielbierg.
Estas películas solo constituyen una lista poco exhaustiva de ejemplos que dejaron huellas en las mentes. Son verdaderas referencias y siguen siendo difundidas en la televisión. Sirven de ejemplos y son considerados como obligatorios por los cinéfilos. En este sentido, el festival Lumière nos las pone a disposición, para que nos puedan transportar a partir de la primera difusión en las salas de cine, en cualquier época.