Los dainas, poesía corta y poco conocida de Letonia

Jean-Baptiste Roncari, traducido por Amélie Rastoin
11 Octobre 2014



Capital Europea de la Cultura 2014, este año Riga ha multiplicado los eventos y las ferias que promueven la cultura letona. Dicho título permite a la ciudad expresar su folclore nacional, e incluso cantarlo, ya que los letones son justamente considerados como un pueblo de cantadores. Como los haikus en Japón, Letonia tiene su propia forma de poesía: los dainas. Se cantan o recitan en las ferias populares, son textos pacificadores, primordiales para quien quiere entender la construcción de la identidad letona. Los dainas son más que sólo textos con estilo, desempeñaron – y lo siguen haciendo – un papel primordial en la historia del país.


Credito DR
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Se transmiten oralmente de generación en generación, aunque su génesis todavía no ha sido determinada. Sin embargo, los primeros dainas escritos datan del siglo XVI y ya tienen su forma definitiva: la mayoría de los dainas son cuartetos compuestos de troqueos o dáctilos escritos en letón, tratando de varios temas, desde la mitología letona a asuntos de la vida diaria. El género se ha conservado a través de las épocas en el territorio letón, a pesar de siglos de ocupación y opresión, lo cual muestra que los dainas son un elemento típico de la cultura letona y una de las bases para la construcción de su identidad.

Es más, poco antes la independencia de Letonia en 1991, los letones usaron dichos dainas como arma diplomática durante la « Revolución cantada ». Masas enteras cantaron en coro aquellos intemporales y simbólicos cantos. Por estas razones, la forma del daina está inscrita desde 2001 en el programa Memoria del mundo de la Unesco.

Kas to teica, tas meloja, Ka saulīte nakti guļ ; Vai saulīte tur uzlēca, Kur vakaru norietēj' ?

Quien dijo eso, mintió, que el Sol se acuesta por la noche; ¿El Sol se levanta? ¿Dónde se acostó ayer?

¿Porqué un rayo cultural tan débil?

Entonces, ¿por qué el daina es menos famoso que el haiku en Japón o que otros géneros literarios en general? El idioma puede ser una razón. De hecho, en el mundo sólo 2,5 millones de personas hablan el letón (mientras que 127 millones son nativos en japonés, por ejemplo). En Francia, Michel Jonval, ex alumno de la Escuela normal superior, ha sido el único que ha tratado de traducir una parte de dichos poemas. Una parte solamente, pues sería sorprendente que el millón y medio de dainas que existen hoy pudiesen ser traducidos algún día.  

De hecho, son tan numerosos que hoy por hoy varios organismos continúan la labor de archivarlos. El primero en coleccionar estos textos en el siglo XIX fue el escritor de folclore Krišjānis Barons. Su nombre es importante ya que su gesto impulsó el despertar del sentimiento letón de identidad y de nación.

Otra razón posible para explicar el poco conocimiento de los dainas en el mundo puede ser que uno tendría que ser letón para apreciarlos plenamente. Hay que entender la relación que existe entre los letones y la naturaleza, su historia, su identidad, para deleitarse del sentido profundo de dichos cuartetos. Las traducciones nunca podrán transmitir las connotaciones precisas producidas por las palabras y las sonoridades. Pero aunque no se pueda apreciar el texto original, cada uno puede disfrutar de la forma cantada de los textos. Entonces, antes de tomar la decisión de ir a Letonia, lo mejor será escuchar los cantos en su casa para hacerse su opinión propia. Sin embargo, persiste un obstáculo: es difícil encontrar álbumes de cantos folclóricos letones.   

Afortunadamente el disco de cantos elegidos y cantados por Vaira Vīķe-Freiberga*, presidenta de la República de Letonia entre 1999 y 2007, constituye un apuesta segura. Publicado por el Centro de gestión de la cultura « Lauska », el disco ofrece un amplio abanico del repertorio musical letón.

Los dainas como expresión de su identidad

Así pues, la poesía letona tiene poca fama, pero su perennidad y su historia le han otorgado todo su prestigio. Mientras nuestra poesía contemporánea va abandonando el alejandrino y las formas fijas como el soneto, el daina sigue resistiendo al paso del tiempo. Por eso no es de sorprenderse que dichos textos escritos en letón – casi siempre anónimos – hayan constituido una verdadera referencia para las poblaciones cuya identidad fue oprimida. Hoy en día, libre e independiente por fin, el pueblo letón proclama los textos con orgullo durante las grandes reuniones.

El daina, pues, no sólo es un antiguo canto tradicional. También es una herramienta mayor de protesta política, un símbolo de la identidad letona tan importante en su historia, y un modelo literario demasiado desconocido. Apostamos que el título de capital europea de la cultura dará ventajas a Riga para promocionar la cultura del país y al mismo tiempo seguir  “europeizándose”. De hecho, interesarse por los dainas es interesarse por Letonia, la historia letona, y los singulares componentes del Salad Bowl europeo. Desde la mitología hasta la vida diaria, uno puede vivir la historia del país a través de estos textos. Finalmente, cada daina contiene dos historias: la que cuenta y la que la rodea.

Sen to Rigu daudzinaja, Nu to Rigu ieraudziju, Visapkart smilšu kalni, Parti Rīga udeni.      

Desde hace largo tiempo honramos a Riga, por fin la he visto, alrededor de las colinas de arena, Riga, incluso en el agua.

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